-¡Mamá! ¡Mamá!
-¿Qué pasa cariño?
-Me han roto el corazón.
Examinó la cara de su hija. Roja, con los ojos aguados y el rimel corrido y con miles de lágrimas que corrían por sus mejillas. Tenía una mano con un clinex apoyada sobre el pecho.
-¿Qué ha pasado?
-Dice que estamos demasiado lejos. Que me ama, pero no me siente cerca suyo, ni siente mi latir en su cabeza.
-¿Y tú le amas?
-¡Claro que sí! Con toda mi alma, mi corazón, mi cabeza. Con cada parte de mi ser. Me tiraría por un precipicio solo por él, traicionaría a la persona que más quiero por él. Cruzaría un océano y miles de brasas por él.
-Entonces no te engañes.
-¿A qué te refieres?-dijo secandose las lágrimas
-Que si de verdad te ama, todo lo demás da igual. Cariño, para el amor no existe edad, ni sexo, ni horas, minutos, meses o sengudos. No existe distancia, no existen barreras, no existen palabras...Sólo existe un sentimiento. Y ese es el amor. Ni más ni menos, simplemente amor.
:) Que triste... Pero es muy bello.. Enhorabuena !
ResponderEliminarmuy bueno!!
ResponderEliminarPrecioso!! la primera vez que te visito, como podras ver ya te sigo, puedes encontrarme en http://susurrandohistoriasamedialuna2.blogspot.com/
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